Recomendación: "Tres anuncios por un crimen" de Martin McDonagh

Martin McDonaugh regresó al plano de la pantalla grande luego de cinco años gracias a la producción, escritura y dirección de Tres anuncios por un crímen. Con una actuación sobresaliente de Frances McDormand y un Sam Rockwell que se consagra, hacen de esta película algo necesario para ver. Además, Woody Harrelson logra acoplarse con jerarquía a la elevada vara establecida por los actores mencionados anteriormente.

La película refleja un pequeño pueblo donde se produjo el asesinato de la hija de Mildred Hayes (McDormand) que el jefe de policía Bill Willoughby (Harrelson) no pudo resolver. Ante su ineficacia, Hayes decide alquilar tres vallas publicitarias para mediatizar y llevar a los medios de comunicación su situación. Con tres anuncios que logran ejercer presión y difamar a Willoughby, Hayes inicia su intención de finalmente dar con el asesino de su hija. Mientras tanto, el oficial Jason Dixon (Rockwell) toma partido por su jefe y se enfrenta a ella en diversos encuentros. Sumado a esto, ciertas formas en su accionar lo colocan en un escalón especial en la Comisaría, pero siempre fue sostenido por Willoughby.

La historia se desarrolla de una manera fluida, mostrando a qué costos, tanto en su vida privada como pública, estaba dispuesta Hayes a lograr su cometido. Además, refleja tanto las situaciones personales de Dixon y de Willoughby de formas adecuadas que encajan perfectamente con el producto final.

La película, quizás, es dueña de una historia simple, pero está muy bien escrita y dirigida, además de que no hay cabos sueltos y que cada uno de los hilos están bien unidos entre sí. Lo que hace de Tres anuncios por un crimen un film de obligación cinéfila, para concluir, son las extraordinarias actuaciones de McDormand, Rockwell y Harrelson, que se enmarcan en un contexto donde lograron mostrar lo mejor de cada uno.

Puntuación: 9/10